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Por Pablo Santiesteban , 3 de noviembre de 2020

“Puerto Montt” y “Sentados frente al mar”, los legados de una canción

El éxito de Los Iracundos fueron el común denominador de estos íconos para la ciudad capital de la Región de Los Lagos.
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Si hay alguna canción que sea icónica de una ciudad chilena esa es “Puerto Montt” del grupo uruguayo Los Iracundos. Es de esos típicos temas que cuando se escuchan ponen la piel como gallina desde los primeros compases, con el rasgueo inicial de la guitarra, la percusión y especialmente el acorde del órgano que marca la atmósfera de la canción. De seguro más de algún puertomontino que vive fuera de su ciudad debe emocionarse íntimamente al escuchar el tema.

La canción fue grabada el 16 de octubre de 1968 y afianzó aún más el éxito para la banda uruguaya que en aquellos años la rompía en Latinoamérica. La letra tuvo tanto impacto en la ciudadanía de la capital de la Región de Los Lagos que años después, en 2002, el artista puertovarino Robinson Barría realizó la escultura “Sentados frente al mar”, también conocida como “Los enamorados”, en la costanera de la ciudad, obra icónica para Puerto Montt, aunque también polémica por su estética.

Todo eso por una canción de amor perdido. Lo más asombroso es que Los Iracundos jamás se les pasó por la cabeza hacer un himno de homenaje a Puerto Montt porque… nunca lo habían visitado.

“POR TU AMOR”

Según entrevistas que dio posteriormente el vocalista de Los Iracundos, Eduardo Franco, el tema originalmente se iba a llamar “Por tu amor”. Franco creó el tema junto al manager del conjunto Cacho Valdés, aunque otros medios de prensa dicen que fue junto al director y fundador del grupo Juano Velásquez. Era 1968, un año lleno de sueños y esperanzas entre los jóvenes seudo “hippies” de la época de la melena larga y pantalones “pata de elefante” y camisas con cuello largo y en punta.

En un descanso en una de las tantas giras exitosas de los uruguayos. Franco intentaba cantar el coro de “Por tu amor”, pero sentía que algo fallaba. El fraseo no cuadraba y no rimaba bien. Empezaron a darle vueltas a la canción y no pasaba nada, Franco sencillamente estaba incómodo al cantar. De repente alguien vio un periódico que ofertaba pasajes aéreos a Puerto Mont y el nombre de la ciudad quedó rondando. Ya en los ensayos en los estudios RCA Víctor, mitad en broma y mitad en serio, le dijeron a Eduardo Franco ¿y por qué no mejor cantás Puerto Montt?. Probaron y la rima, el fraseo el espíritu de la canción calzaban a la perfección.

“Sentados frente al mar, mil besos yo le dí” o la frase “bajo el cielo azul de Puerto Montt”, eran versos categóricos de un amor perdido en medio de un paraíso melancólico frente al mar. Cuando Franco cantaba el coro con el nombre de la ciudad el tema salía como cañón. ¡De seguro será un éxito!, se dijeron.

“PUERTO MONTT”

Y claro que fue un éxito, a fines de octubre de 1968 la canción ocupó los primeros lugares de los rankings en Argentina, Uruguay, Perú y Chile. En Puerto Montt la canción fue un impacto y una sorpresa, más aún de un grupo que estaba “a la moda” a fines de los sesenta. En las discos de la ciudad la canción se ponía toda la noche, en los “malones” y guitarreos con fogatas varios “lolos” y “lolas” se enamoraban cantando la canción. Un himno había nacido.

Lo curioso es que Eduardo Franco nunca conoció Puerto Montt, salvo por ese aviso de diario. El vocalista de Los Iracundos falleció en 1989 de un cáncer linfático, pero al año siguiente la agrupación visitó Puerto Montt. Aunque hay que decirlo, Los Iracundos nunca fueron lo mismo sin la inconfundible voz de Eduardo Franco.

En una entrevista, Franco expresó que un amigo de Uruguay le dijo que había quedado tan “pegado” con la canción que hasta visitó Puerto Montt para sentarse frente al mar y añadió que “pero no se pudo, pues es un pueblito chiquito, todo gris, no existe algo”. Claramente Puerto Montt no era lo que es hoy en los años sesenta.

Aunque Puerto Montt ya era una ciudad conocida, principalmente por la colonización alemana de mediados del siglo XIX y la creación del Aeropuerto El Tepual en mayo de 1960, el éxito de Los Iracundos la hizo aún más conocida. Al principio los fans de Los Iracundos en Latinoamérica pensaban que Puerto Montt era una ciudad uruguaya, sin embargo se sorprendían al darse cuenta que estaba en Chile. No es descabellado pensar que la canción le produjo grandes beneficios turísticos a Puerto Montt que posteriormente, a inicios de los años setenta, tuvo grandes avances en infraestructura, los que no han parado hasta la actualidad.

Los Iracundos estuvieron en el Festival de Viña del Mar en 1972 en la cúspide de su éxito y regresaron a la misma cita internacional en 1995, ya sin Eduardo Franco.

“LOS ENAMORADOS”

Nos trasladamos ahora hasta el año 2002, en el aniversario 149° de la fundación de la ciudad de Puerto Montt. Por años la costanera puertomontina fue tildada de “fome”, pero las autoridades empezaron a motivar proyectos para hermosear su paseo.

Ese año se instala la estatua de “Los enamorados”, también llamada "Sentados frente al mar", en alusión a la canción “Puerto Montt”. Fue al artista Robinson Barría el autor de la obra de 6 metros de altura que se inspira en los enamorados de la canción que miran hacia el seno de Reloncavi. La figura fue concebida en 1996, pero recién en 2001 hubo financiamiento para hacerla realidad.

La obra escultórica fue inaugurada el 14 de febrero de 2002 con fuegos artificiales y con la presencia de Los Iracundos que interpretaron la famosa canción, a esta altura himno de la ciudad. La figura se encuentra instalada en avenida Diego Portales —costanera de la ciudad— entre las calles Pedro Montt y Guillermo Gallardo y fue elaborada con la técnica de ferrocemento: esqueleto de hierro y malla de alambre cubiertos de cemento, más pigmentos de colores y preservantes.

Estéticamente “Los enamorados” fue muy criticada, al punto que el año pasado se hizo una votación para ver si la gente quería que la sacaran de la costanera y trasladarla a la isla Tenglo, mientras se remodelaba la costanera. La opción de dejar la estatura en su lugar ganó ampliamente. El mismo Robinson Barría ha reconocido a medios de prensa portomontinos que no está conforme con el resultado de la obra por una serie de inconvenientes que hubo en la elaboración de los moldajes y por la “tozudez” de él mismo para terminarla el 14 de febrero, pese a que le dijeron que se tome su tiempo. Barría dijo a un medio que descartaba la posibilidad de arreglarla porque “(las obras) son queridas y validadas artísticamente como son». 

Lo curioso es que la famosa pareja ha sido valorada internacionalmente, pues en 2013 el Diario de Cuyo de Argentina la añadió a un listado de “rincones para enamorados” y en 2016 la agencia de noticias rusa Sputnik la eligió como uno de los monumentos “más raros” de Sudamérica.

Pese a su estética, “Sentados frente al mar” ya es famosa y muchos turistas que visitan la ciudad se sacan fotografías junto a ella “bajo el cielo azul de Puerto Montt”.

 

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